Cuento que integra: Venganza, secreto inconfesable, y descripción objetiva de una foto familiar.

 Soy la mama de una niña muy linda, estoy en mi casa de la isla relajada tomando unos mates. El sol recién empieza a caer, el viento continua soplando, moviendo levente mi pelo que acaricia mi rostro. Estoy tan relajada que olvide lo que descubrí ayer por la noche. Estaba yendo a darle el beso de buenas noches a mi hija, cuando me pegunta -Ma, esta bien vengarse de alguien. Yo muy sorprendida le pregunto porque y me responde que se sintió traicionada por su amigo y que estaba reflexionando si lo que hizo estuvo bien o mal. Continua hablando y me confeso que ayer, cuando estaba en la casa de su amigo Tomas ella dijo que se fue al baño pero en realidad agarro el marcador mas oscuro e indeleble posible y le pinto las sabanas. Lo contaba algo orgullosa, pero a la vez inquietada al saber si lo que hizo fue muy grave o no. Estuve hablando con ella un rato y le dije que tenia que avisarle a la mama de Tomas porque no estuvo bien lo que hizo. Se enojo conmigo, creía que lo que hizo fue por venganza por no enseñarle a jugar a la pelota y eso lo justificaba. Le explique que las cosas en la vida no se resolvían de esa manera, no le gusto mi respuesta y procedió a darse la vuelta y taparse con la frasada. Intente volver a hablarle pero me ignoraba completamente, mi hija se enoja fácil y no hay manera de volver a hablar. 

A la mañana siguiente le hable a la mama de Tomas explicándole lo sucedido y pidiéndole unas disculpas, me ofrecí a comprarle unas sabanas nuevas pero no acepto. Ademas, obligue a mi hija a pedir disculpas, pero ella seguía con que lo que hizo estuve bien porque su amigo antes había hecho algo que a ella no le gustaba. 

Hoy al mediodía, me fui a bañar y cuando salí, me encontré con mi piano vertical barnizado, manchado con liquid paper, casi me desmayo. Ese piano me lo regalo mi bisabuela cuando yo era adolescente, por surte no era muy grande la linea blanca pero aun así no estaba como antes, y se notaba. Muy enojada con mi hija la rete y empezamos a discutir. No llegamos a ningún acuerdo, yo la quiero pero es bastante cabeza dura, ojala que con los años sea mas fácil nuestra relación, reniego mucho con ella. Lo único que espero es no tener que enterarme otra cosa que haga a escondidas mía...